El pasado viernes 1 de noviembre, el icónico Paul McCartney se presentó en el Estadio El Campín de Bogotá, y para los asistentes, fue una noche para recordar. A sus 81 años, el ex-Beatle mostró que su energía y amor por la música siguen tan vibrantes como siempre, cautivando al público con una mezcla de éxitos de su etapa en The Beatles, Wings y su carrera como solista.
El setlist de la noche fue un viaje por algunas de las canciones más emblemáticas de la música popular. McCartney inició con “Can’t Buy Me Love”, transportando a los asistentes a la época dorada de The Beatles. Desde allí, el concierto se desarrolló con clásicos como “Junior’s Farm”, “Drive My Car”, “Let Me Roll It” y “Jet”. Cada tema fue recibido con euforia, y el público cantó y se emocionó al ritmo de sus favoritos.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue la interpretación de “Here Today”, una canción que Paul dedicó a su amigo y compañero John Lennon, seguida por “Something”, dedicada a George Harrison. Ambas canciones hicieron que el estadio entero se conmoviera, recordando el legado de The Beatles y la conexión especial que unía a estos artistas legendarios.
McCartney también aprovechó la ocasión para presentar algunos de sus éxitos recientes, como “New”, así como temas clásicos como “Let It Be” y “Hey Jude”, en los que el público participó con fuerza, convirtiendo el estadio en un mar de voces y luces. Sin duda, “Hey Jude” fue uno de los momentos más impactantes de la noche, con miles de personas coreando al unísono el icónico “na-na-na-na”.
El cierre del concierto estuvo cargado de energía con “Live and Let Die”, que incluyó efectos de pirotecnia, y “Hey Jude”, dejando a la audiencia completamente satisfecha. Fue una noche en la que Paul McCartney demostró por qué es uno de los músicos más influyentes y queridos de todos los tiempos.
Este concierto no solo fue una presentación, sino un homenaje a la música y a la historia de uno de los grandes de todos los tiempos. Bogotá fue testigo de un momento único, en el que generaciones se unieron para celebrar la vida y obra de Paul McCartney.